Las heridas del pasado son como las cicatrices de guerra,
que a veces llevamos tan valientemente y con orgullo
pero en otros momentos escondemos porque siguen doliendo.
Ya no las escondo,
no me sirve taparlas mas,
estoy orgullosas de ellas porque me hacen la mujer que soy,
gracias a ellas aprendí a aceptar el pasado y decir adiós con una sonrisa.
Porque no es lo mejor pero es mi historia de vida,
donde sigue faltando paginas que tendré que sentir y vivir.
Una vez me dijeron
que todo lo que le pides a Dios
no te lo da, sino que te da la oportunidad de ser lo que deseas ser o tener.
Yo siempre pedía paz, entereza y fuerza.
y en el peor momento pude obtenerlos,
lo asombroso es que nadie,
me lo dio siempre lo tuve yo.
Se que faltan muchas mas cosas por pasar,
y espero poder sobrellevarlas,
aprendiendo a desechar
y con otras poder lograr firmes decisiones sin dudar.
Hace mucho que no me encontraba feliz,
cansada y agotada sola con mi manto de soledad.
sin estar desesperada de sacármela de encima y observando todo de otros ángulos.
Ya no quiero correr,
solo quiero caminar y disfrutar,
el paisaje que Dios me hoy da.
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