Una nube gris puede acrecentar mi soledad y las innegables ganas de dejar de luchar...
De luchar contra el destino,
De luchar contra las personas que quieren verme mal...
De luchar contra mí peor enemigo, que siempre es uno mismo...
Los días terminan siendo tediosos para una rutina que me arruina,
Porque al amanecer comienzo con las esperanzas llenas en grandes proyectos,
Pero al final del día la desilusión de no haber podido lograr la mayoría de mis metas,
Me da una desazón que no puedo sacarme ni con calor...
Pero aunque en mi camino trastabilleo innumerables veces,
también son las mismas veces que no me rindo volviendo a empezar...
Porque aunque haya nubes grices en mi alma
Siempre tengo fe que saldrá el sol a despejarlas,
Y así podré admirar aunque sea por instante nada más...
El camino que a pesar de todo pude caminar.
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